Por: Catherine García Bazó
En los últimos años de su vida Buffalo Bill
reconoció que había sido un error haber eliminado casi por completo una especie
de la faz de la tierra. ¿Entenderá algún día Henrique Capriles el error que a
causa del progreso neoliberal está llevando a la especie humana al borde de la
extinción? Bastaría con que lo entiendan los que piensan votar por él.
Antes
de ser un autobús el progreso fue un ferrocarril. Sus orígenes
se remontan al siglo XIX, cuando el lema “orden y progreso” se
popularizó como expresión de una corriente filosófica denominada positivismo. Especie
de culto cientificista inventado por Augusto Comte, en oposición al
“iluminismo” que tenía por lema Sapere
aude (atrévete a pensar).
El
padre de esta idea de progreso creía que formando científicos especialistas
en el estudio de la sociedad, se descubrirían sus leyes, como quien descubre
una vacuna, la velocidad de la luz o la ley de la gravedad. Con tal conocimiento,
sustentado en hechos estrictamente “reales”, se comprenderían y por ende se resolverían
los problemas sociales. ¿Que fácil, no?
Así
nació la sociología como ciencia. 180 años después abundan los sociólogos y
otros científicos sociales, pero ya se sabe que sus investigaciones y
descubrimientos no son suficientes para resolver los problemas de la sociedad si
los gobernantes carecen de dos requisitos indispensables: sensibilidad social y
voluntad política.
La
verdad es que los grandes problemas que impiden el “progreso” de las naciones
no suelen ocurrir por falta de conocimiento científico, sino por grandes
injusticias como el colonialismo, la explotación y la discriminación en todas
sus formas. Enfermedades y prejuicios tan arraigados como el racismo, clasismo,
intolerancia religiosa, homofobia o machismo; no se curan por el trabajo de
unos cuantos especialistas o asesores. Se requiere una Revolución política,
social y cultural, como la que vive Venezuela actualmente, para desafiarlos.
Volviendo
a la idea positivista de progreso, en los Estados Unidos, en pleno auge de la
industria del acero, la ideología del progreso se materializó en la
construcción de ferrocarriles que conquistaban las praderas del lejano Oeste al
tiempo que ensanchaban la “civilización”. Ese “territorio salvaje, infectado de
búfalos y piel rojas” estaba destinado a progresar. El hobby de muchos hombres
civilizados era el tiro al búfalo desde el tren en marcha. A veces los cazaban
para comer, pero en la mayoría de los casos lo hacían por entretenimiento.
Con
este nuevo “deporte”, que tenía como antecedente el “tiro al indio”, los
colonos civilizados lograron, en pocas décadas, dos grandes victorias del
progreso estadounidense: Arrinconar en pequeñas reservas, a los sobrevivientes
de la población aborigen norteamericana, y reducir la población de búfalos, que
se contaban por millones, a especie en vías de extinción. Después del
ferrocarril, el mayor exponente del progreso se llamó William Frederick Cody,
mejor conocido como Buffalo Bill.
Sorprendentemente,
el positivismo y su ideología capitalista de progreso se popularizó en el mundo
occidental y se mantuvo vigente durante todo el siglo XX. A principios de los
años '60; después de haber progresado tanto, nuestros hermanos norteamericanos
se acordaron de la pobre América Latina, y con la buena intención de brindarnos
su apoyo económico, político y social, crearon el programa conocido como
“Alianza para el Progreso”.
La
idea era simple: repartir unos 20 millones de dólares para ayudarnos a “mejorar
la vida de todos los habitantes del continente”, para ayudarnos a salir de
abajo, pues. ¿A cambio de qué? De casi nada, del compromiso de los EE.UU de
cooperar en los aspectos técnicos y financieros. En otras palabras, a cambio de la soberanía,
que se iría perdiendo sutilmente por medio de esta avanzada neocolonial que
terminó sirviendo para comprar voluntades, conciencias y gobiernos.
El
verdadero objetivo de esta Alianza, recibida con gran beneplácito por la
“opinión pública” y muchos gobernantes serviles, ávidos de dinero fresco, era
frenar el “mal ejemplo” que la Revolución Cubana le estaba dando al resto de
América, al elegir un camino distinto al del progreso capitalista.
La
estrategia imperialista fue denunciada públicamente por el Che Guevara en 1961,
en el mismo momento de su nacimiento: La Conferencia Internacional
de punta del Este (Uruguay). Abriendo su intervención el Che fue al grano
citando a José Martí: “Quien dice unión económica, dice unión
política. El pueblo que compra manda, el pueblo que vende sirve; hay que
equilibrar el comercio para asegurar la libertad... El influjo excesivo de un
país en el comercio de otro se convierte en influjo político…. Cuando un pueblo
fuerte da de comer a otro se hace servir de él. Cuando un pueblo fuerte quiere
dar batalla a otro, compele a la alianza y al servicio a los que necesitan de
él. El pueblo que quiere ser libre, sea libre en negocios.” Hoy como ayer, estas palabras de Martí
están más vigentes que nunca y sólo para algunos permanece vigente esa
ideología capitalista y colonialista de progreso.
Profesora UBV –
Comunicación Social.
Me gustó el artículo. La sociedad latinoamericana empieza despertar y se da cuenta que fue, en muchas formas, abusada por parte de los grandes a los que sólo les interesó el crecimiento "hedonista" (por llamarlo asì) de su territorio.
ResponderEliminarSin embargo, sólo en el último párrafo se hace una comparación superficial con Henrique Capriles, sin explicar por qué su posible gestión se parece a la de los norte-americanos más capitalistas.
Henrique Capriles puede representar un riesgo, independientemente de la certeza que tengan muchos de su transparencia. Muchísimos creyeron en la de Chávez y éste les defraudó, porque, independientemente de la percepción altamente subjetiva de si Chávez hizo algo muy bueno o muy malo con Venezuela, éste mintió con respecto a los planes que dijo al pueblo que tenía e hizo exactamente todo lo contrario que prometió, así que nada puede excusar a Capriles de esa misma posibilidad. Chávez nos vendió una idea y nos metió un "paquete socialista y ya casi comunista"
Sin embargo, el beneficio de la duda la merece Capriles, porque ningún trillado argumento de su directa vinculación con la IV República me convence lo suficiente de que así sea, de hecho me repele y me hace considerarlo más como Presidente.
Yo, muy personalmente, creo en la sencillez ideológica de Capriles, ya que Chávez ha representado un exceso de información doctrinaria que ha abrumado al sistema venezolano y latinoamericano.
Dudo que un pueblo que ya abre los ojos deje meterse un "paquetazo" en caso de que ese sea el plan de Capriles si resulta presidente.
En mi muy personal opinión (y la de muchos venezolanos, quizá la mayoría), aquí sólo necesitamos un progreso objetivo y cuantificable. Ya tenemos demasiados años tratanto de hacer conquistas mayoritariamente emocionales, subjetivas y casi oníricas.
ESTIMADOS HERMANOS DE LAS SECTAS A LAS BANDAS DE SECUESTRADORES DEL MUNDO Y DE GUATEMALA:
EliminarMis secuestradores de las bandas de plagiarios ya casi no secuestran gente a nivel mundial por la paz del mundo que realicé por mis encarnaciones divinas de los Dioses aborigenes del mundo y del cristianismo como tambien de los extraterrestres y de Guatemala, pero por mis calumniadores todavía me desean secuestrar aunque yo sea la causa de la paz del mundo y de la union popular a mi favor. Les solicito a mis secuestradores de que olviden a mis calumniadores porque los tales engañaron a Guatemala desde el año de 1,992 bajo las calumnias de prevaricador y de violador sexual masoquista por una necrofilia voyeurista popular frustrada por mis calumniadores. Tambien realicé la paz de la delincuencia mundial y de los países de la tercera guerra mundial.
Atentamente:
Jorge Vinicio Santos Gonzalez,
Documento de identificacion personal:
1999-01058-0101 Guatemala,
Cédula de Vecindad:
ORDEN: A-1, REGISTRO: 825,466,
Ciudadano de Guatemala de la América Central.
Cansados de ser durante tanto tiempo juguetes de la política capitalista, políticos aventureros e ignorantes sociales no gobiernan para vivir en armonía con la naturaleza y la igualdad de oportunidades, razón más que suficiente para que el socialismo ejerza tan enorme y extraña influencia en los corazones de los hombres y mujeres como lo demostró una vez más el pueblo venezolano, el pasado 7 Oct.
ResponderEliminarMe ha gustado tu blog compatriota, te sigo.
Saludo revolucionario!!!
ESTIMADOS HERMANOS DE LAS SECTAS A LAS BANDAS DE SECUESTRADORES DEL MUNDO Y DE GUATEMALA:
ResponderEliminarMis secuestradores de las bandas de plagiarios ya casi no secuestran gente a nivel mundial por la paz del mundo que realicé por mis encarnaciones divinas de los Dioses aborigenes del mundo y del cristianismo como tambien de los extraterrestres y de Guatemala, pero por mis calumniadores todavía me desean secuestrar aunque yo sea la causa de la paz del mundo y de la union popular a mi favor. Les solicito a mis secuestradores de que olviden a mis calumniadores porque los tales engañaron a Guatemala desde el año de 1,992 bajo las calumnias de prevaricador y de violador sexual masoquista por una necrofilia voyeurista popular frustrada por mis calumniadores. Tambien realicé la paz de la delincuencia mundial y de los países de la tercera guerra mundial.
Atentamente:
Jorge Vinicio Santos Gonzalez,
Documento de identificacion personal:
1999-01058-0101 Guatemala,
Cédula de Vecindad:
ORDEN: A-1, REGISTRO: 825,466,
Ciudadano de Guatemala de la América Central.